Es un sistema montañoso de la Sierra Madre Oriental, que es el icono geográfico de Monterrey y orgullo de los regiomontanos.
El nombre se lo puso en el siglo XVI el noble y explorador luso-hispano Alberto del Canto, fundador de Saltillo y uno de los primeros vecinos de Monterrey, debido a su perfil parecido a una silla de montar.
El sistema tiene cuatro picos: Antena, La Virgen, Sur y Norte, este último es el más alto, con 1821 metros sobre el nivel del mar.
Fue declarado Área Natural Protegida y Monumento Natural y hay varios senderos para coronar las elevaciones, con paraderos a lo largo del recorrido.
El Cerro de la Silla es crucial para la sustentabilidad de Monterrey y la preservación de sus recursos naturales, incluyendo fuentes de agua, aire, suelos y especies vegetales y animales.
Es un refugio de especies de fauna, como armadillos, ardillas, tlacuaches, coyotes y aguililla cola roja, algunas en riesgo de extinción.